Por Ariel Juárez
“La información es la gasolina del siglo XXI, y la analítica de datos el motor de combustión” – Peter Sondergaard
El pasado 31 de marzo, la máxima autoridad de generación de información en México, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer una serie de medidas extraordinarias que implementará debido al estado de emergencia sanitaria derivada de la cuarentena por el COVID-19. Una de éstas implica postergar todas las encuestas que involucran la interacción entre entrevistado y entrevistador, cara a cara. En su lugar, se levantarán datos por internet, teléfono y plataformas digitales para continuar con la generación de información, tan necesaria en estos momentos en los que las decisiones deben hacerse con base en evidencia científica.
Mención aparte (por su envergadura e importancia) tiene el tema del Censo de Población y Vivienda. Aquí se puede consultar el comunicado completo https://bit.ly/3axoN7R
Datos para el turismo
En la lista que se presenta el comunicado mencionado, no se mencionan las Encuestas de Viajeros Internacionales (EVI), estadística que brinda información del gasto de los visitantes internacionales, los flujos por diferente tipo de transporte, entre otras.
La información derivada de las EVI es de suma importancia en el sector turístico y la Balanza de Pagos. Cabe recordar que de esta encuesta salió la cifra que, en 2018, posicionó a México en el lugar 7 mundial por entrada de turistas y en el 16 por gasto turístico, de acuerdo con el ranking elaborado por la Organización Mundial de Turismo (OMT).
Obtener esta información para visitantes internacionales, a través de medios telefónicos o correo electrónico, sería prácticamente imposible si no se cuenta con los datos de cada uno de los visitantes. De esta manera, la forma tradicional de generar estadística se ve amenazada por la imposibilidad de obtener información directamente de las personas, en este caso de los visitantes internacionales.
Sin embargo, desde hace algunos años, las fuentes de información no tradicional, como los teléfonos móviles, las tarjetas de crédito/débito y las redes sociales están generando miles de millones de datos de la huella digital que se traducen en patrones de consumo y movimiento de los turistas en nuestro país y a nivel mundial.
Nuevos Métodos
A finales del año pasado, el Instituto Nacional de Estadística de España (INE) comenzó un ejercicio masivo para obtener información sobre la movilidad de los españoles en días laborales, en domingo, en algunos días del verano y en Navidad, mediante los datos telefónicos que facilitaron las operadoras al instituto.
Un ejercicio de este tipo permite, por ejemplo, conocer el desplazamiento de la población hacia sus lugares de trabajo o a qué destinos viaja en vacaciones. Esto, a su vez, proporciona información valiosa para mejorar la calidad de los transportes y los servicios públicos.
Es importante apuntar que este ejercicio sirvió para conocer que más del 90% de la población española se mantuvo en su casa durante los primeros días de abril 2020, como medida de contención del Covid-19. Eso sí, esta medida está apegada a la Ley de la Función Estadística Pública, que garantiza el secreto estadístico y que cumple con todos los requerimientos de la Ley de Protección de Datos. Aquí se puede consultar datos resultantes del ejercicio: https://www.ine.es/covid/covid_movilidad.htm
En México se han realizado algunos esfuerzos usando datos de fuentes de información no estructurada. Por ejemplo, la Secretaría de Turismo, en conjunto con el banco BBVA, llevaron a cabo un ejercicio durante un año, analizando alrededor de 1.5 mil millones de registros mediante el uso de información de las transacciones bancarias tanto de los turistas nacionales, internacionales y los propios locales. Esto llevó a generar información a niveles geográficamente muy detallados y con una temporalidad tan corta como nunca antes se había obtenido. Aquí se pueden encontrar los resultados de este ejercicio: http://www.datatur.sectur.gob.mx/SitePages/BigData.aspx
Estos son un par de ejemplos, de muchos que se han realizado a nivel global, del uso de Big Data para el turismo. En el sector turístico existen muchas fuentes de información, así como una infinidad de aplicaciones móviles, que permiten obtener un perfil de los viajeros más afinado a través del análisis de las etapas de su viaje, desde el momento de inspiración, la estancia en el destino y los comentarios a su regreso a casa.
Evolucionar hacia nuevas fuentes de información
El panorama de crisis que estamos viviendo, nos obliga a reflexionar y darnos cuenta de que es momento de evolucionar hacia nuevas fuentes de información, para buscar la forma de continuar con la recopilación de datos del sector.
Será necesario seguir impulsando el uso de información de transacciones bancarias que los visitantes realizan para comprar bienes o servicios turísticos, los datos de los dispositivos móviles, comentarios en redes sociales, entre otros. Si bien existen huecos en la información de fuentes no estructuradas (como conocer los datos derivados de los pagos en efectivo) es, sin duda alguna, un acercamiento importante dada la falta de información que habrá al no poder recabar información de manera tradicional como las encuestas cara a cara.
Dada la situación actual, es buen momento para transitar de la estadística tradicional del uso de encuestas probabilísticas al uso de nuevas técnicas como el Big Data. Esto no implica sustituir fuentes y metodologías existentes por otras, sino buscar la forma en cómo ambas (fuentes estructuradas y no estructuradas) pueden coexistir para dar paso a una nueva forma de generar información.
Aún quedan algunos retos por delante: aplicar estrategias a nivel subnacional, la forma de organización del sector turístico y convencer a grupos empresariales y gobiernos (en sus tres niveles) de trabajar de la mano. En México, el turismo ya ha dado los primeros pasos en el uso de Big Data; ahora, es momento de no bajar la guardia y meter el acelerador para innovar en la generación y análisis de información.
Sin duda alguno el ejercicio que se hizo con Bancomer, puso a México en la vanguardia, felicidades a los que hicieron esto posible. Ojalá que este impluso se continue y se incremente. La información es la base de las decisiones!!!
Sin duda alguno el ejercicio que se hizo con Bancomer, puso a México en la vanguardia, felicidades a los que hicieron esto posible. Ojalá que este impluso se continue y se incremente. La información es la base de las decisiones!!!